En Diciembre del 2008 recibí un mail de Carmen Diez del Corral de la Encarnación, contándome que había dado conmigo en internet por casualidad y preguntándome si éramos parientes y en qué grado. Le respondí con los datos que obraban en mi poder desde que en 1987 mi padre y yo hiciéramos un librito-guía sobre los Diez del Corral con motivo del homenaje a la tía Lola Diez del Corral López Montenegro por su cien cumpleaños, y pensé de inmediato lo fácil que sería trasladar aquellos datos a una web-blog como las que facilita gratuitamente "Blogspot", -además de lo sencillo que es en una plataforma así añadir y corregir datos o incluso colocar fotografías para consulta de todos los Diez del Corral que pudieran interesarse por su apellido.
Aquel homenaje a la tía Lola dio pié para que nuestro pariente y académico Luis Diez del Corral Pedruzo comentara algunas excelencias sobre el sentimiento de pertenecer a una familia tan numerosa, y algunos hasta se animaron luego a organizar algunas multitudinarias reuniones de los Diez del Corral en Madrid. Pero en una sociedad tan dispersa, seguro que también habrá quien piense que los clanes no dejan de ser más que una curiosidad o un pasatiempo de tipo coleccionista. Sea como fuere, aquí están los datos y en su exposición solo me quedan las dudas sobre la accesibilidad a los mismos. Dada mi inicial ingenuidad o generosidad, no veo inconveniente alguno en que el blog tenga público acceso pero si alguien me argumenta lo contrario, tampoco tendré inconveniente en restringir el acceso al mismo mediante invitación.
En cuanto a la actualización de los datos agradecería todo tipo de ayuda para ajustarlos lo más posible a la realidad dentro de la sobriedad inicial con que se realizó el libro-guía: nombres, lugares, fechas, títulos o vida profesional por la que cada uno quisiera ser identificado en su caso. En cuanto a las fotos, aspecto mucho más sensible, yo iré subiendo las que tengo o las que me manden, y si alguien quiere que retire sus fotos o cambiarlas por otras en que se vea más favorecido, no tendré inconveniente alguno en hacerlo. En todo caso parece lógico el criterio de que las fotos estén en el arco de la madurez de la vida, es decir, desde el momento de la boda hasta los cuarenta o cincuenta años.
En la columna de la derecha aparecen todas las páginas abiertas hasta ahora ordenadas de abajo a arriba y sin separación alguna. Los cortes entre generaciones se producen en los siguientes puntos:
Primera Generación: los patriarcas.
Segunda Generación: Desde Julian Diez del Corral Blanco de Salcedo hasta Francisco Diez del Corral Blanco de Salcedo
Tercera Generación: Desde Luis Diez del Corral Bravo hasta hasta Carmelo Diez del Corral Angulo.
Cuarta Generación: Desde Luis Diez del Corral Pedruzo hasta Alberto Diez del Corral Lozano.
La Quinta Generación estaba muy verde en 1987. En el libro original sólo había 4 brotes o nuevas ramas, pero en la fecha en que se abre esta web-blog (enero del 2009) es de imaginar que serán muchas más. Posibles ramas hay 42, y como todas están en pleno desarrollo o con posibilidades, de momento aparecerán agrupadas en una entrada para cada una de las 5 ramas originales con los nombres de sus bisabuelos: Los Julianes (3), los Santiagos (15), los Joaquines (2), los Ramones (8) y los Franciscos (14). Por seguir con la jerarquía o el orden del blog los hijos de las ramas más vetustas aparecen siempre debajo de los más jóvenes.
Concluyo esta presentación transcribiendo la Dedicatoria y la Introducción de la Guía Original de 1987, cuyo formato y portada eran así:
A la tía Lola
en su cien cumpleaños
11 de enero de 1987
"A diferencia de la mayoría de la gentes, cuando al saber de nuestro apellido, aluien nos pregunta si acaso somos parientes de aquel otro Diez del Corral que conoce, orgullosamente y aún sin saber de quien se trata, le respondemos siempre que sí. La proximidad temporal y generacional respecto al tronco común surgido el pasado siglo de D. Justo Diez del Corral Ozcariz y Dña Pilar Blanco de Salcedo (en la foto) en Anguciana, nos hacen sentirnos parientes a pesar de nuestro desconocimiento mutuo.
Hemos elaborado esta pequeña e incompleta guía de los Diez del Corral con la intención de regalársela a la tía Lola, por si los cien años le hacen perder un poco su prodigiosa memoria familiar, y para conocernos todos un poco más, al menos, mediante la referencia de nuestros nombres, lugares de nacimiento o habitación y fechas significativas de nuestra vida. Los más animados podrán completar todos los datos que faltan o incluso, hasta pegar fotos en las contrapáginas.
Obviamente nos hemos ordenado por generaciones, como en un árbol, abriendo ramas allí donde por fruto de la naturaleza y de la tradición histórica, que mantiene el apellido por vía masculina, éste ha permanecido en primer lugar. No son menos parientes los que tienen el apellido en segundo o tercer lugar que muchos de lo que los tienen en el primero, pero ellos, así es el juego, deberán figurar en algún otro libro distinto al de los Diez del Corral.
De cada una de las ramas consignamos el matrimonio, fecha y lugar del enlace y a continuación su domicilio o domicilios más conocidos a lo largo de su vida. A continuación los hijos con sus fechas de nacimiento y, en su caso, de fallecimiento. También incluímos un escueto dato sobre su titulación académica u ocupación más conocida y después, en caso de abrir rama, la página correspondiente (en la versión del blog este dato ha sido sustituido por el enlace (link) asociado al nombre). En caso de no abrir rama por se línea femenina o no haber descendencia, añadimos el nombre del cónyuge, fecha de matrimonio, hijos habidos y domicilio conocido.
Todos los errores, así como el esfuerzo en realizar esta primera recopilación familiar han de atribuirse a Carmelo Diez del Corral Angulo (hoja 26) y a su hijo Juan Diez del Corral Lozano (hoja 52)."
(En agosto del 2018 he dado la vuelta al blog mediante el sencillo recurso de cambiar las fechas de edición; de este modo se parece mucho más al formato libro que al formato diario)
(En agosto del 2018 he dado la vuelta al blog mediante el sencillo recurso de cambiar las fechas de edición; de este modo se parece mucho más al formato libro que al formato diario)
